Hace poco, mi madre me contó una historia que me gusto bastante, y no tiene nada especial realmente, no es una mega historia y posiblemente no sea interesante para los demás... pero me apetecía contarla:
Año 1988, mi madre se disponía a hacer la compra del día para la pequeña familia, ella, mi padre, y mi hermano mayor. En el supermercado aun estaba la frutería atendida por un frutero, en el que cogías las frutas a granel. Vio unos preciosos melocotones, con su aterciopelada piel y un olor fresquísimo, y pensó inmediatamente en mi padre, que había estado trabajando de noche y estaba en mi casa acostado. De vuelta a casa, solo hacia pensar en lo bien que olían esos melocotones, todo el camino obsesionada con eso.
Llegó a casa, soltó la bolsa de melocotones, y empezó a ponerse nerviosa.... Cogió un melocotón y un cuchillo, y se lo comió, algo muy inusual en alguien que no come fruta como ella.
Fue la primera vez que comió melocotón, y la ultima hasta entonces; y se dio cuenta de que estaba embaraza de mi...
Ni una prueba después, ni un análisis, ni una ecografía, solo 9 meses e instinto maternal, nací yo. =)